Miedo, tengo miedo

Miedo, tengo miedo

Diario de Sevilla reseña Cómo funciona el miedo (Ediciones Rialp, 2022), un ensayo sobre «la aversión al riesgo y la obsesión por la seguridad como rasgos definitorios de este siglo XXI».

La crítica, firmada por Javier González-Cotta, recuerda que hoy vivimos en la civilización del miedo, y señala que el «histerismo, que antaño era propio de mentes enfermas, ha dejado de ser una atrofia nerviosa para convertirse, incluso, en una forma de compromiso no exento de autoridad moral. Los cataclismos de la naturaleza asociados al cambio climático o el Covid-19 han dado su corpus político, económico y moral a la histeria».

Sobre Cómo Funciona el miedo

Uno de los principales impulsores de la cultura del miedo es el desmantelamiento de la autoridad moral. El miedo parece proporcionar una solución provisional a la incertidumbre moral y, por esa razón, es objeto de interés por parte de colectivos e individuos. Furedi predice que hasta que la sociedad encuentre una orientación más positiva hacia la incertidumbre, florecerá la politización del miedo.

La sociedad es continuamente bombardeada con mensajes de amenazas incalculables e ingobernables, que instauran la impotencia y la pasividad; crece así la sensación de ansiedad y la constante búsqueda de nuevas formas de seguridad, tanto física como ontológica. ¿Cuáles son los impulsores del miedo? ¿Cuál es el papel de los medios en su promoción? ¿Quién se está beneficiando? Si comprendemos cómo funciona el miedo, podremos fomentar actitudes que ayuden a lograr un futuro más sereno.